Mientras por un lado se ven ascensos como el del RB Leipzig, el fútbol alemán despide a un miembro fundador de la Bundesliga y uno de los clubes históricos del campeonato teutón. En el palmarés de uno de los clubes más antiguos de Alemania destacan una Bundesliga y dos Copas de Alemania, además de la final de la Recopa de Europa perdida contra el West Ham United en 1965.
Tras su dramática derrota en el partido de promoción de descenso contra el Regensburg de 3. Bundesliga por 0-2, el conjunto muniqués se ve avocado a una situación límite: el máximo accionista, el jordano Hasan Ismaik, invertirá para pagar la licencia imprescindible para permanecer en la Liga Alemana de Fútbol (DFL).
El futuro es incierto, ya que no se sabe si habrá solamente un descenso, a la cuarta división regional, o se verá relegado alguna categoría más. La empresa del millonario jordano, HAM International, emitió un comunicado dejando claro que no invertirán más en el TSV 1860 Munich.