En la noche de ayer, cerca de la ciudad de Medellín, un accidente del avión que transportaba al equipo de fútbol brasileño Chapecoense a jugar la final de la Copa Sudamericana contra el Atlético Nacional de Medellín, ha sufrido un accidente y han muerto 75 de las 81 personas que iban a bordo.
En el avión viajaban 72 pasajeros y 9 miembros de la tripulación. Por ahora solamente se ha confirmado que el defensa Alan Ruschel, Danilo y Jakson Follmann son tres de los supervivientes. El accidente ha tenido lugar entre los municipios de La Ceja y La Unión en el departamento colombiano de Antioquia.
La avión, matrícula TT2933, debía haber aterrizado en Medellín hacia las 21.33 horas locales (03.33 hora española del martes) pero perdió contacto con la torre de control cuando volaba cerca de La Ceja, según la BBC.
El club deportivo Chapecoense, de la ciudad de Chapecó, en el estado brasileño de Santa Catarina, se dirigía a Medellín para disputar el miércoles el partido de ida de final de la Copa Sudamericana contra el Atlético Nacional. Los colombianos, conmovidos por lo ocurrido, han realizado una solicitud oficial a la Conmebol para que el torneo vaya al conjunto brasileño. Una forma de honorar a los fallecidos.
Nunca un cuento tuvo un final tan trágico. El Chapecoense en las últimas semanas había sido la estrella en varias ciudades del país. La primera de todas por llegar alcanzar la primera final de su historia. La última, sólo 24 horas antes del accidente, como espectadores: eran rivales Palmeiras cuando el club de Sao Paulo ganó el título brasileño.
