La palabra anomalía significa literalmente “desviación de la regla y del canon común” y es principalmente sinónimo de excepción.
Estas palabras son mucho mas que palabras; son una nueva manera de entender “el mundo del fútbol” y representan los conceptos fundamentales de nuestro proyecto.
Cada día nuestra comunidad cuestiona el significado de estas palabras. El animo de nuestra comunidad, la esencia de nuestro ser, se fortalece en una perspectiva alternativa y resistente respecto a los modelos que nos imponen.
“Otro fútbol es posible” es la síntesis de nuestra mirada sobre la realidad.
Sin embargo hablar de regla es desviante, tenemos que hablar de un sistema de reglas, “Sistema” identificable con la idea del fútbol. La capacidad total de este (del fútbol) dentro de esta sociedad es una de las características principales, una de las razones por el cual el fútbol es mas que un deporte, es un fenómeno social total.
El proyecto “Stella Rossa 2006” es el resultado de un camino colectivo, que encontró en las necesidades de un grupo de personas su fuerza y a partir de este punto se desarrolló la que consideremos ser una excepción en el mundo del fútbol.
Cada día que pasa el proyecto crece, en virtud de compartir nuestras experiencias, denunciando firmemente los aspectos relacionados con el deporte en general. Rechazamos de cualquiera forma la degradación de los valores relacionados con el futbol por parte de intereses puramente económico-comerciales y creemos en su capacidad para producir experiencias sociópatas y de agregación social.
Creemos en la pasión y en su mas exquisita espontaneidad.
Este es el espíritu que nos lleva a la cancha cada vez.
Eso es lo que nos hace constantemente diferente y esto es lo que legitima nuestra condición de posibilidad como anomalía, sabiendo que hay mucho que luchar y muy poco que compartir en muchos ámbitos.
Cualquiera que quisiera acercarnos a algunas ideologías política tendrá la prueba de no haber entendido nada y al mismo tiempo de estar profundamente lejos de nuestra idea de fútbol popular.
La “Stella Rossa” nace y crece desde el bajo y su asamblea ha luchado para no terminar representando una expresión común y una estructura vertical, defendiendo la verdadera expresión del fútbol popular.
Sin embargo hay mucho trabajo por hacer y aún hay muy pocas personas que piensan como nosotros. El deporte se hace popular sólo si se permite accesibilidad a las demandas de una colectividad y si se hacen posibles mecanismos participativos que sepan involucrar la mayoría de la gente.
En estos años han crecido y nacido diferentes experiencias de «fútbol resistente», pero pocos de ellos nos han enseñado algo y pocos de ellos hablan nuestro mismo idioma y comparten nuestra misma idea de fútbol.
Las experiencias de fútbol popular no pueden ser definidos como tales sólo porque son auto-organizados y auto-gestionados; un proyecto de ejecución de fútbol vertical, también si se cree de ser popular, no es capaz de producir nuevas formas de interacción horizontal y es probable que termine reproduciendo un modelo de fútbol esclavizado por el mainstream, favoreciendo una vez mas dinámicas de exclusión que nos alejan del verdadero sentido del deporte.
No es un rebaño de soñadores, sino una comunidad deportiva anormal.
Otro fútbol es posible sólo si se cree realmente en las ideas te llevan por este camino.