Los altercados sucedidos durante el Paok-Olympiacos y la posterior suspensión de la Copa de Grecia han provocado un ultimátum de la FIFA. La Federación Internacional no ha visto con buenos ojos la suspensión del torneo nacional. Tanto es así que podría sancionar a los clubes griegos con la expulsión de competiciones internacionales.
El pasado 7 de marzo, en el minuto 86 del encuentro que enfrentaba a los equipos de Salonica y Atenas ocurrió una invasión de campo. Más de un centenar de seguidores saltaron al terreno de juego lanzando bengalas y arramplando con todo después de un penalti no pitado a su equipo. Una imagen que hace mucho daño al fútbol griego.
Desde entonces el campeonato continuó sin interrupciones, mientras el gobierno griego decidía cancelar definitivamente la Copa de Grecia. La FIFA se ha manifestado en contra de Atenas y, a través de una carta enviada al Ministro de Deporte, solicita que se restablezca el certamen. La Copa se paró con dos semifinales por jugar, una de ellas sería otra vez Paok-Olympiacos. La final estaba prevista que se disputase el 15 de abril. En caso de negación a poner en marcha de nuevo el torneo, todos los equipos griegos serán expulsados automáticamente de las competiciones internaciones por clubes. El máximo organismo del fútbol ha dado de tope el día que se debería jugar la final, si no hay una decisión clara, ejecutará la sanción.